Es un hecho en los países occidentales. Es típico, generalizado, del día a día. Una mirada sostenida, un dedo acusador, una frasecita al oído, una risita, otra mirada... Muchos de nosotros nos preguntamos, ¿por qué me señalas? Porque somos físicamente diferentes, porque somos minoría, porque estamos en Europa y no en África,...
Son muchas las situaciones donde a lo largo de la vida nos vemos señalados: en la escuela, en el trabajo, en el supermercado, en la playa,... Son muchas las veces que escuchas: "el negrito...", "la chica negra...", "el morenito, la morenita...."
Pero tiene que haber algo más. ¿Curiosidad? ¿Desprecio? ¿Sentimiento de superioridad o de compasión? ¿Sorpresa? ¿Invasión? ¿Rechazo? Siempre hay alguien que te señala y debe haber un motivo detrás de ello.
Y, sin embargo, nosotros los descendientes de africanos negros no les señalamos, no les miramos y no lo entendemos... Simplemente una parte de nosotros se pregunta ¿me señalas por ser negro?
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